Monday, May 30, 2011

FIN DE TRAYECTO



Desde atrás del mostrador,
con poca simpatía y un obligado toque de eficiencia,
la muchacha pregunta sin pasión alguna
por el código de identificación de su reserva.
"C de Casa, M de Mamá",
responde el que me acompaña sin dudar ni un solo instante,
para después seguir diciendo:
"Erre"
"¿Cómo?" (la empleada no lo entiende)
"Erre de Ramón", repite ufano
y termina su alfabético espiche
recitando algunos pocos números que no vienen al caso.

Estoy a su lado y lleno de tristeza inconsolable
por la apabullante verificación de aquello que
por infortunada suerte todo yo sospechaba y mi cuerpo sufría,
(escozor en las tripas,
agujas en los pies,
gotas de aceite hirviendo sobre la fina piel de mis encías),
cual David sin honda ni Goliath,
cual Gioconda sin marco,
contenido, galante, para mí y hacia adentro,
suavemente, sonrío.

Mi aniñado caballero andante,
mi príncipe de celeste envergadura,
el jinete embozado y fantasioso
con pies de silicato de magnesio
y manos de seráfica estructura,
no se atrevió a pronunciar "Retorno"
ni "Regreso",
tampoco "Renunciar"
o "Reincidencia".
¿Será que su inconsciente algo maltrecho
(buchón sin contenciones, delicado palomo malherido)
no pudo soportar el ensordecedor estruendo
de las anteriores evidencias?

14 comments:

Marina Judith Landau said...

Dante, me ha fascinado este poema!
Te dejo un abrazo, que tengas un día hermoso.

el tiempo del fuego said...

A mí más bien me ha entristecido y mucho.
Penas de amor....Mejor nos dedicamos a lanzar cohetes a la luna....y a sonreirle a todo el mundo aunque el mundo ya no nos cause gracia.
Un abrazo!

Dante Bertini said...

Marina, Vanina,
gracias por pasar, por leer, por comentar.
"No soy feliz, tal vez no importa..."

Marina Judith Landau said...

A mí sí me importa.
Me fascina tu modo de escribir. Me fascina que de algo triste puedas hacer tanta belleza...
Tu destino es de felicidad, Dante. Lo que sea, se resolverá del mejor modo.
Te estoy enviando mis mejores energías.
Y además te estoy abrazando.

Dante Bertini said...

MARINA,
GRACIAS DE VERDAD. Sensible como estoy en estos momentos TU ABRAZO ES REGENERADOR.
Siempre quise un destino de felicidad y en largos momentos pude lograrlo, sin embargo no creo que esa felicidad pueda ser completa si no es compartida.
Hay que volver a intentarlo.

el tiempo del fuego said...

Ojalá Dante que tus deseos se hagan realidad, sean cuales sean.
Te dejo un mimo en mi blog (una poesia de Mario Benedetti)
Porque mis intentos de poesia por ahora no pasan de bocetos
Un beso

el tiempo del fuego said...

Desearía poder estar del otro lado del Atlántico para poder darte un abrazo....

Dante Bertini said...

Vanina por dos:
gracias, aunque mis deseos están demasiado atacados en estas horas bajas...ya no tengo tan claro lo que quiero.
"Ruega que tus plegarias no sean atendidas..."
¿Las mías lo fueron?

el tiempo del fuego said...

No entendí demasiado lo que quisiste decir.
Son demasiadas adivinanzas...

Dante Bertini said...

Vanina,
lo siento, no era mi intención producir misterio alguno.
A veces hablo conmigo mismo y en este caso te decía con palabras de otros (Borges, Capote, la Biblia misma)que paso un momento difícil sentimentalmente.
Gracias por preocuparte. Todo pasará, espero. Abrazos

Anonymous said...

me quedé muda...no existen palabras,par comentar,este poema,exquisito!
un abrazo poeta,te sigo...
lidia-la escriba

Dante Bertini said...

Gracias, Lidia,
me ruborizo y alegro al mismo tiempo.
Un abrazo

Basquiat said...

muy musical, realmente envolvente.
saludos.

Dante Bertini said...

Basquiat,
gracias querido
tus elogios también resultan musicales